Mario Benedetti
Escritor uruguayo destacado poeta, novelista, dramaturgo, cuentista y crítico, y, junto con Juan
Carlos Onetti, la figura más relevante de la literatura uruguaya de la segunda
mitad del siglo XX y uno de los grandes nombres del Boom de la literatura
hispanoamericana. Fue cultivador de todos los géneros, su obra es tan prolífica
como popular; novelas suyas como La tregua (1960) o Gracias por el fuego (1965)
fueron adaptadas para la gran pantalla.
Otro cielo
No existe esponja para lavar
el cielo
pero aunque pudieras
enjabonarlo
y luego echarle baldes y
baldes de mar
y colgarlo al sol para que
se seque
siempre faltaría el pájaro
en silencio
no existen métodos para
tocar el cielo
pero aunque te estiraras
como una palma
y lograras rozarlo en tus
delirios
y supieras al fin como es al
tacto
siempre te faltaría la nube
de algodón
no existe un puente para
cruzar el cielo
pero aunque consiguieras
llegar a la otra orilla
a fuerza de memoria y
pronósticos
y comprobaras que no es tan difícil
siempre te faltaría el pino
del crepúsculo
eso es porque se trata de un
cielo que no es tuyo
aunque sea impetuoso y
desgarrado
en cambio cuando llegue al
que te pertenece
no lo querrás lavar ni tocar
ni cruzar
pero estarán el pájaro y la
nube y el pino.
Trata sobre lo magnifico que es el cielo, pero al verlo te da cuenta de que no es
un solo elemento el que hace que toda su belleza resalte, sino que es una
mezcla de varios lo que hace que el cielo sea lo que es.
El cielo no puede ser tocarlo pero si observar y puedes sentir toda su
belleza, toda su energía y grandiosidad. En el poema los elementos esenciales
que componen un cielo maravilloso son, , las nubes que va pasando poco a poco y
nos hacen sentir el movimiento, que no es algo estático lo que vemos.
Pero también las aves que
surcan el cielo son importantes, porque no solamente vemos un cielo hermoso por
el que pasan unas nubes bellas. Sino que la propia vida, algo que tiene la
capacidad de volar, lo surca y nos sobrecoge el hecho de que en el cielo
también puede haber vida, como una metáfora sobre la divinidad.
La unión de todos esos
elementos, las aves, las nubes y el cielo que, además de la naturaleza, va cambiando de color a medida que va pasando el día, hacen que podamos ver en
toda su esplendorosa belleza y hacernos
sentir sobrecogidos por toda la belleza que podemos ver, por todo aquello que
el ser humano es incapaz de dominar pero si admirar y hacerle sentir pequeño.